La leche materna es el mejor alimento que un bebé puede recibir: hecho a su medida, según sus necesidades, con todos los anticuerpos imprescindibles, siempre disponible, ya esterilizado y con la temperatura justa.
La leche materna es el mejor alimento que un bebé puede recibir: hecho a su medida, según sus necesidades, con todos los anticuerpos imprescindibles, siempre disponible, ya esterilizado y con la temperatura justa.